SEX EDUCATION
Lo que sabemos de la cuarta temporada
Porque más allá de las escenas explícitas, hay material que llega a la ternura.
Fotos Netflix
Esta serie inglesa, te golpea desde el primer capítulo de la primera temporada con tu propia percepción del sexo. Si esperas ver sexo, lo tendrás. Si esperas ver pornografía, no.
Sex Education celebra el sexo en el más amplio sentido de la palabra, pero su genialidad justamente está en que incluso el material más explícito permanece lejos de la vulgaridad y más cerca de la humanidad. Sobre todo la de unos chicos desorientados, obsesionados con penes y váginas, pero que no están seguros si es por broma, por ser populares o porque algo les pasa ‘allá abajo’, que los confronta con una novedad de su cuerpo, su alma y su deseo.
Todo indica que la cuarta temporada la veremos en septiembre. Y ahí nos enteraremos si Otis y Maeve al fin estarán juntos, después de que en la temporada 3, nuestro amado terapeuta sexual experimentara por fin, el sexo a sus anchas. Pero el amor es lo que los une, así estén separados. Ella estará estudiando en Estados Unidos y a él lo veremos en una nuevo campus, que será de mente mucho más abierta que Moordale. Nuevos personajes llegan y nuevas experiencias para jóvenes y mayores.
Quien ve Sex Education no podrá ser indiferente a la propia ternura y al encanto de unos jóvenes que se están conociendo. Así que esa ingenuidad y esa torpeza hace ver cualquier escena abiertamente sexual, como algo que supera la mera genitalidad.
Lo mejor es que a medida que la serie avanza, el tema sexual, los gemidos y los polvos, se ven con tanta naturalidad, que incluso las metidas de pata de los protagonistas adolescentes y adultos, conmueven, porque la serie está llena de personajes adorables.
Cada temporada, que está al aire en Netflix, invita a ver el sexo con una mirada divertida, madura, lejos de todo tabú, inclusiva, pues aquí, todas las parejas sexuales son invitadas.
Una serie que además hará que muchos espectadores se escandalicen, se avergüencen y hasta se nieguen a verla.
Apta para mayores de 16 por su mirada honesta, divertida, inteligente y sensible. Seguro a más de uno le orientará de forma directa y sin consideración.
Esta producción les dice a los colegios que la Educación Sexual merece ser una materia que se trate con respeto, cuidado, pero también con humor y sin ninguna tara, donde toda pregunta y duda son valiosas, sin discriminar a nadie, porque en el sexo, como en la vida, todos caben…
Y de ñapa, los adultos que la vean (si les parece o no con sus hijos adolescentes) sabrán, (porque nunca es tarde), si han sido buenos, regulares o pésimos amantes, y si pueden y quieren mejorar.
Eso sí, habrá que lanzarse a esa exploración sin remilgos y con entrega generosa por el otro. A todos nos educa, Sex Education.