Hombres de Dios
Entre el cielo y el infierno
La serie que recién se estrenó en Telecaribe fue filmada a finales del 2020 y hoy ha llegado a internet con gran éxito. Son 6 episodios, cada uno de 25 minutos. Entrevistamos a uno de sus protagonistas, el actor Ramsés Ramos.
Fotos y vídeos de apoyo: Cortesía Toctalk-Oficina de prensa
Puedes ver la serie en www. hombresdedios.tv
La televisión regional y local está dando de qué hablar desde hace mucho por su calidad en producción y en historias. De ahí que trabajos como La Niña Emilia, de Telecaribe, haya sido la gran ganadora en los premios India Catalina, de 2018. Pues bien, las regiones lo volvieron hacer y Hombres de Dios: Entre el cielo y el infierno, producida por Kymera Studios para Telecaribe, con la financiación de MinTic y el apoyo de la Secretaría de Cultura de Barranquilla, la Universidad de Norte y la Arquidiócesis de Barranquilla, confirma una vez más que la televisión local tiene mucho para decir.
Creada por Carlos Franco y Roberto Flores, la serie fue se rodó durante 6 semanas, entre octubre y noviembre de 2020. Algunas escenas se hicieron en Soledad y Tubará, municipios del Atlántico, y las locaciones principales fueron iglesias ubicadas en Barranquilla.
Cada uno de los seis relatos cuenta con un elenco de lujo, entre quienes figuran, además de Ramsés, actores como Carlos Serrato, Jairo Ordoñez, Victoria Hernández, Hernán Méndez, Julio Sánchez Coccaro, Santiago Alarcón, Manuel Navarro y muchos más.
Cada episodio puede confrontar al espectador con su propia fe, su búsqueda y sus profundas reflexiones sobre la vida y el destino.
En palabras de Roberto Flores, uno de los directores junto a Iván Wild, adentrarse "en los diferentes oficios desarrollados por el hombre y en este caso, cuando tu oficio es hablar en nombre de Dios y hacer del otro, una mejor persona, mi interés se triplica. No es fácil ser un hombre de Dios, conocí a algunos maravillosos durante el proceso, profundamente humanos, llenos de dudas y aún así, decididos a cumplir su labor. Siempre me han gustado más los individuos que las instituciones".