BORAT 2:
Políticamente incorrecto
Director y actores
Esta es un coproducción entre Estados Unidos e Inglaterra.
El guion es del actor Sacha Baron Cohen junto a otros escritores como Anthony Hines, Dan Swimer, Peter Baynham, Erica Rivinoja, Dan Mazer, Jena Friedman, Lee Kern. La dirección es de Jason Woliner. Actúa el propio Sacha, quien repite en su papel de Borat, junto a la actriz búlgara Maria Bakalova.
De qué trata
Este ‘falso documental’ tiene lugar 14 años después del primero, cuando Borat es liberado por el opresor gobierno de Kazajstán. Este le encomienda la misión de entregar un soborno al vicepresidente estadounidense Mike Pence. Pero en el trayecto todo se complica. Borat termina viajando con su hija e involucrado con personajes de extrema derecha y anti covid.
Por qué verla
. Es una historia muy feminista y una sátira a Donald Trump.
. Un espejo del lado extremo de la sociedad americana.
. Por su actualidad. Baron Cohen ubica la peli en pleno fenómeno de pandemia y las posiciones políticas que ha generado el covid, en el que unos creen y otros no.
Por qué no
. Si esperas la misma chispa de su clásico predecesor, puedes desilusionarte.
. Algunas escenas pueden incomodar, por un humor subido de tono que puede provocar náuseas.
. La crítica al gobierno y a los amigos de Trump es de frente y sin cariño.
Noticias reales que superan la ficción
Verdaderos cantos racistas
Una de las escenas más insólitas de Borat 2 tiene lugar en un evento ultraconservador que se llamó, en junio de 2020, March for our rights (Marcha por nuestros derechos) al que llegó Sacha Baron Cohen, disfrazado de cantante de música Bluegrass, género popular en los años 40. Allí, entona unos cantos de ultraderecha, con letras racistas, que los demás también replican. Eso sucedió en la vida real y por Twitter quedó registrado el 27 de junio de 2020. Lo que no se sabía entonces era que detrás del intérprete estaba el comediante de Borat 2, y que era material maravilloso para la película que se estrenó en octubre por Amazon.
Despertó la ira de Trump
Sacha publicó en su cuenta de Twitter un mensaje provocador para el presidente norteamericano Donald Trump. Dice el tuit: “Donald. ¡Agradezco la publicidad gratuita para 'Borat'! Lo admito, tampoco te encuentro gracioso. Pero, sin embargo, el mundo entero se ríe de ti. Siempre estoy buscando gente para interpretar bufones racistas y vas a necesitar trabajo después del 20 de enero ¡Hablemos!”.
El origen del mensaje tiene lugar en una conversación que sostuvo el mandatario con su equipo de prensa y que llegó a oídos del comediante. Allí Trump habría dicho de él: “Es un farsante, no le encuentro divertido. Para mí, él es asqueroso”.
¿Amenazado por los Oscar?
En 2012 fue El Dictador, la película que lanzó a la fama internacional a Sacha Baron Cohen. Una cinta provocadora. Ese año, él venía diciendo que asistiría a los Premios de la Academia con el traje del dictador. Desde lo alto de Hollywood le dijeron que si se acercaba a menos de una milla de la ceremonia, sería arrestado por 200 agentes del FBI. Ese año, el propio director Martin Scorsese le pidió que fuera, pues el filme, Hugo, del que él hacía parte, tenía varias nominaciones. Sacha asistió y lo hizo vestido como El Dictador. Efectivamente lo detuvo el FBI, registraron su limusina, lo dejaron pasar, le advirtieron que no hiciera nada indebido y le pusieron ocho guardias de seguridad. Sacha llegó con una urna de cenizas, que dejó caer sobre el traje del presentador del canal E!, Ryan Seacrest. En realidad, era harina para pancakes, pero el comediante decía que se trataba de las cenizas del dictador norcoreano Kim Jong-il. Luego de su satírico acto fue expulsado de la Red Carpet, pero le dejaron fotografiarse. Ese año, Hugo ganó 5 premios Óscar.
Turistas detenidos
El famoso bikini para hombre que se promociona desde el mismo poster de Borat 2, ‘el ‘mankini' ya había hecho carrera en la primera cinta y no faltaron las críticas por ‘semejante despropósito’ y grotesco traje. Algunos fans de la peli, no ven el mankini con malos ojos. En 2017 trascendió la noticia de que seis turistas checos que estaban de visita en Kazajstán se disfrazaron de Borat, se vistieron con el mankini y se tomaron fotos, con tan mala suerte que fueron detenidos por la policía, acusados de vandalismo por uso de “indecente vestimenta” y obligados a pagar una multa de 57 dólares. Toda la saga de Borat ha sido prohibida en ese país.